Diaria mente XVIII

Mi primer día de trabajo resultó ser todo lo aburrido que podía esperar, de hecho, no podría hablar de trabajo, puesto que no hice nada, y de hecho no puedo considerarlo primer día, puesto que sólo estuve un par de horas, así que mañana viene lo bueno, ja.
Por otro lado... estoy sincera total y absolutamente devastada por el Marduk gate, no creí que me fuera a transtornar a este punto. No sé si habrá una continuación, me duele demasiado porque lo perdí por segunda vez, o lo que es peor, me doy cuenta de que jamás tuve nada. Tristemente ahora veo con una claridad que antes no tuve, nada importa, ni lo que dijo ni lo que hizo después, tan sólo me pregunto si es coincidencia o destino, ¿será destino? ¿será posible que dos personas puedan estar siempre unidas sin estar juntas?
Tal vez sólo estamos de pie frente al mismo abismo, uno de cada lado, uno mirando hacia el lado contrario, uno mirando al frente, y otro mirando detrás.