Thursday, February 05, 2009

Diaria mente XLVIII

Hoy he tenido un colapso nervioso de aquellos, justo cuando creía que lo peor se estaba pasando ya. Todo comenzó cuando ayer me asignaron una presentación en flash de casi 40 diapositivas!!!!!!!!!!!!
Ok, eso no es dificil:
1) si te dan las instrucciones claras y precisas sobre que se va a hacer, y con que objeto
2) si te informan que existe una plantilla preestablecida que debe respetarse y no debe ser rota en modo alguno
3) si cuando acabas la primer diapositiva te informan que tienes que hacerlo igual al power point ya hecho en vez de dejarte trabajar otras dos propuestas.

Luego entonces... nada de lo anterior pasó, por lo que yo tuve que:
1) quedarme una vez más a trabajar hasta que me dolió todo lo que me podía doler (incluyendo el orgullo de "diseñador")
2) rumiar mi rabia lenta y dolorosa cual vaca mascando pasto hasta que no pude más y estallé como la psicopata que ahora soy
3) tener que lidiar con la bola de chismosos que se dieron cuenta y que se dirigieron a mí con la obvia intención de hacerme sentir mejor pero que en realidad empeoraron mi situación ya que me frikea mucho ser atendida por gente en momentos penosos como esos (no es que no lo aprecie, pero en verdad, me cuesta entender eso del "consuelo").
4) ser tratada "con pincitas" ya que la asistente del licenciado que recibió mi trabajo se dio cuenta, le contó al licenciado y fueron a hablar conmigo a "mi" escritorio para decirme que lo dejará así y que aprobarían mi trabajo tal como quedara. Al final, cuando finalmente logré dizque concluir la presentación (porque 2 horas después me llamaron para decir que había cambios) me recibieron con un "te quedó bonito" que se oyó como los "que bonito" que les dicen a los niños para compensarlos cuando hacen berrinche...
En fin, mañana en la secretaría todo mundo sabrá que soy una psycho débil mental (que si soy pero no es para que los mortales se enteren), seré vista como una profesionista poco entregada a su trabajo, inmadura y remilgosa... esto es el mundo adulto, gracias, maldita necesidad de verte invulnerable que no puedo conseguir.

Nadie dijo que era fácil eso de estar vivo...

Pero el día anterior lo compensó todo, así que quiero agradecer con todo lo que tengo a una señora cuyo nombre no conozco que trabaja en una tienda de dulces en la calle de Pino Suárez. ¡¡¡¡Gracias!!!! primero por devolverme sin condición alguna mi celular, el cual tiré accidentalmente en el autobús durante el trayecto al trabajo. Luego gracias por contestar la llamada y perder su tiempo para que yo pudiera ir a recuperarlo. También gracias por no pedir más de cincuenta pesos a cambio, ya que era todo lo que podía darle. Y finalmente gracias por mostrarme que no todos los seres humanos de estos lares son unos gandallas aprovechados.
Muchas Gracias Señora!!!!! le debo la vida!!!!!, bueno, mi celular, mis números, mis mensajes y mis mil pequeñas preocupaciones cotidianas.
Debo admitirlo, al final no todo es malo.

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